La marca de moda británica Burberry domina el mercado japonés y tiene como objetivo aumentar sus ventas en el principal mercado de la moda del mundo. En un esfuerzo por impulsar su negocio en Japón, Burberry abrió recientemente una nueva tienda en Omotesando, Tokio, centrándose en los productos importados de la marca, su segunda tienda insignia en el país. Otras tiendas en Asia ofrecen productos con licencia e importados, mientras que las nuevas tiendas solo cuentan con productos importados.
Si bien los productos con licencia se han vendido bastante bien en el mercado japonés, la marca tiene otra dimensión: alta costura importada de Europa, como las colecciones Burberry Prorsum y London. Dado que las ventas de Burberry en Japón representan alrededor de la mitad de sus ventas globales (la facturación fue de alrededor de £ 500 millones (alrededor de ¥ 100 mil millones) en el año hasta marzo de 2002), O’Neill dijo que Japón es «el mercado más importante de la compañía».
Sin embargo, O’Neill cree que la firma todavía va a la zaga de otras marcas de moda globales. «Si comparas (nuestras ventas) con nuestros competidores, nuestros competidores son mucho más grandes», dijo. Sin embargo, O’Neill cree que la diversificación de la empresa en Asia, Europa y América del Norte garantizará su crecimiento continuo.
«Identificamos dos mercados en el mundo donde vemos un crecimiento significativo en los próximos años: son América del Norte y Asia», dijo. «Esos son los dos mercados en los que estamos enfocando tanto esfuerzo y tanta inversión». Además de aumentar las ventas en Japón, Burberry disfruta de un mayor negocio en el resto de la región de Asia-Pacífico gracias a su estrategia de marketing.
